ZARAGOZA | El Real Zaragoza ha iniciado el stage de Benasque con el futuro de muchos futbolistas en el aire. A pesar de que Txema Indias ha avanzado en el apartado de las salidas, todavía hay jugadores ligados a la disciplina zaragocista que viven en la duda. Uno de esos activos es Sinan Bakis, cuyo devenir más inmediato puede ubicarse lejos de La Romareda.
Tras regresar de una etapa poco fructífera en Polonia, Bakis encarna un contexto difícil: su rendimiento en las últimas temporadas no ayuda a la hora de buscar un nuevo destino. Sin ver portería desde hace más de dos años, su fútbol se ha visto reducido a unos mínimos casi impensables en su estancia en Andorra, al igual que el estado de una de sus rodillas.
A pesar de que el tiempo y el contexto juega en su contra, el deseo del ariete continúa siendo el mismo: convencer a Gabi y permanecer una temporada más en el conjunto aragonés. Aunque el turco-germano está logrando agradar al entrenador y a su cuerpo técnico, desde la institución aragonesa se está buscando salida a un futbolista que ahora parece distinto. Mejor en lo físico, Sinan Bakis parece totalmente recuperado de aquellos problemas que lastraron su año en Zaragoza. Su fútbol fluye de una forma distinta, como si estuviera más cerca de sí mismo. No obstante, a estas alturas de la jugada, que pueda continuar en Zaragoza sigue pareciendo un improbable.
El fútbol es el único territorio en el que historias como las de Bakis pueden cambiar. El delantero repite en el stage de Benasque y peleará otra vez contra la lógica.