Sergio Samitier continúa líder en la Vuelta a Bidasoa, aunque con el mismo tiempo que el italiano Matteo Sobrero. Mañana, última etapa en Irún. Jaime Castrillo lucha por la montaña. Fernando Barceló, también con opciones, es séptimo a 23 segundos.
Pasadas ya tres de las cuatro etapas de las que consta la codiciada Vuelta a Bidasoa, continúa de amarillo Sergio Samitier. Está con el mismo tiempo que el italiano Matteo Sobrero, pero con el puestómetro dándole el liderato al de Barbastro. Hoy era, a priori, la etapa reina de la prueba, en la cual ha habido un estrecho marcaje entre los primeros clasificados y sobre todo un férreo control por parte del Lizarte. Los navarros han trabajado duro a lo largo de la jornada para evitar sobresaltos que movieran la carrera en contra de sus intereses camino de Orio, sobresaltos que solían tener como protagonista a Sobrero. Lo han logrado, neutralizando cualquier intento de asalto al amarillo de Sami. Así ha llegado en busca del triunfo un grupo en el que además del propio líder, también viajaba Fernando Barceló, duodécimo en Orio. Jaime Castrillo ha entrado en un tercer paquete a escasos 17 segundos del vencedor, Xavier Cañellas, ciclista mallorquín del Caja Rural.
Mañana, el desenlace. Para bien o para mal se resolverá este duelo que mantienen Samitier y Sobrero en tierras guipuzcoanas. Esperemos que se decante para el oscense. Para ello, además de su solidez como ciclista, tiene a todo un equipo detrás. El Lizarte mañana debe demostrar el gran equipo que es, llevando a su líder a una ansiada y cercana victoria. Rivales habrá varios, ya que la clasificación está muy igualada. Además del empate técnico que mantiene con Sobrero, Mertens anda a sólo 10 segundos, Negrente y De Rossi a 13. También emerge la figura de Fernando Barceló, que solo tiene una desventaja de 23 segundos. Sus opciones son menores pero nunca hay que dudar de las capacidades del oscense. Por su parte Jaime Castrillo luchará también por la montaña, clasificación en la cual tiene que remontar los cuatro puntos que le saca Alessandro Fedali.
Todo eso mañana, en un final de fiesta en la comarca de Irún. La etapa será corta, tan sólo 78 kilómetros pero con cuatro obstáculos por el camino. Gurutze, Aritxilegi y Agina en una primera mitad, esperando Erlaitz al final, un punto que puede ser clave para dibujar la clasificación final, en la que esperemos ver a un oscense en lo más alto.
