HUESCA | La temporada ciclista está llena de kilómetros, puertos, desgaste y viajes, pero hay semanas que lo cambian todo. Para el equipo Torres – Sobato, ese momento ha llegado. La formación aragonesa afronta desde este jueves dos de las citas más importantes y exigentes del calendario nacional: la Bidasoa Itzulia y el Memorial Valenciaga. Dos pruebas que no solo ponen a prueba las piernas, sino también el futuro deportivo de muchos corredores.
Del jueves 8 al sábado 10 de mayo, la Bidasoa Itzulia desplegará su habitual formato de tres etapas, aunque este año llega con novedades que prometen aún más emoción. La carrera arrancará con una dura cronoescalada en Jaizkibel, una subida corta pero explosiva que marcará las primeras diferencias importantes entre los favoritos.
El segundo día, viernes 9, será el momento para los ciclistas más rápidos, en un recorrido entre Irurita y Bera con un único puerto puntuable en los 141 kilómetros programados. Una jornada trampa en la que será clave la lectura de carrera y la colocación.
Y el sábado 10, la traca final: 103 kilómetros entre Hendaia e Irun, con nada menos que seis altos de montaña, culminando en el temido Erlaitz (1ª categoría, 4,1 km al 10,1%), una ascensión que puede decidirlo todo.
Memorial Valenciaga: el clásico que todo joven ciclista sueña ganar
Sin apenas tiempo para recuperarse, el domingo 11 de mayo llegará el turno del Memorial Valenciaga, una prueba mítica en el calendario élite-sub23 y considerada como la joya de la Copa de España. Con salida y llegada en Eibar, los 163 kilómetros del recorrido esconden siete puertos, destacando el mítico Alto de Ixua (1ª categoría, 3,7 km al 9,6%) a solo 28 del final. Este año, la primera parte del trazado ha sido modificada por obras, pero la dureza y el prestigio de la carrera se mantienen intactos.
Torres – Sobato, con seis ciclistas fijos y dos cambios puntuales
Para afrontar esta doble cita con garantías, el equipo Torres – Sobato ha confeccionado una alineación sólida y equilibrada. En ambas pruebas estarán presentes Ismael Castaño, Alberto Domens, Will Kirkham, Joel Morales, Asger Paaske y Callum Twelves, un bloque que mezcla juventud, experiencia y versatilidad.
La séptima plaza variará según la prueba: Marc Villalba estará en la Bidasoa Itzulia, mientras que Edgar Mesa tomará su lugar en el Memorial Valenciaga.
Dos oportunidades para dejar huella en una temporada exigente
Estas dos competiciones suponen una auténtica prueba de fuego para los corredores del equipo aragonés. No solo se trata de pelear por un buen resultado, sino de mostrar talento, resistencia y visión táctica en escenarios donde siempre hay ojos puestos por parte de equipos profesionales.
La Bidasoa Itzulia y el Memorial Valenciaga no son solo etapas en el calendario: son escaparates, son sueños por cumplir, son esos momentos que justifican un año entero de trabajo, sacrificio y pasión.
Con un equipo bien preparado, motivado y listo para el reto, Torres – Sobato afronta su semana grande con la ambición de dejar huella entre los mejores.