ZARAGOZA | El Córdoba volvió a darle una vida extra al Real Zaragoza y logró empatar ante el Eldense sobre la bocina. Lo hizo Nicolay Obolskiy, con todo en contra, en el minuto 89. La expulsión de Magunazelaia y la ventaja de Diawara había puesto al Zaragoza en descenso. Todo cambió en un saque de banda de Jacobo, capaz de ganar el tiempo que el Córdoba necesitaba, un favor imprescindible para nosotros.
Una jornada más, la salvación del Real Zaragoza pasa también por otros. Después de que el Racing de Ferrol ganara el duelo la semana pasada, hoy el Córdoba robó dos puntos del Pepico Amat. Se espera que en La Romareda se alcance una diferencia sustancial, un triunfo en el día de la verdad. La suerte del Zaragoza depende a partir de ahora de sí mismo, del fútbol que sea capaz de proponer ante la SD Huesca.
En el duelo de mañana no faltará el componente emocional, una guerra territorial, una batalla especial. Pero nunca una rivalidad pudo importar menos. El Real Zaragoza debe ganar porque le va la vida en ello, no por el rival que tiene enfrente. El Córdoba hizo un favor imprescindible en la tarde del sábado. Mañana llega el turno del Real Zaragoza. Y, un día más, solo vale vencer.