ZARAGOZA | En una de las muchas vueltas que Miguel Ángel Ramírez le dio a su once titular, Bernardo Vital se perdió. El portugués, un fijo en la zaga del Real Zaragoza, perdió su puesto de la noche a la mañana. Sin embargo, tras la llegada de Gabi al banquillo, Vital parece haber recuperado protagonismo y, lo más importante, el nivel que mostró a principios de temporada. Gabi le devolvió las llaves de la defensa y le presentó una nueva pareja de baile, un Jair Amador que, pese a su error en El Sardinero, ha encontrado su mejor forma con la camiseta del Real Zaragoza. El regreso de Vital es, por tanto, otra buena razón para creer en la permanencia.
Porque la llegada de Bernardo Vital a Zaragoza no fue un experimento. El central, con tan solo 24 años, era el capitán del Estoril Praia de la primera división portuguesa. Sin embargo, se decidió por el Real Zaragoza y, con apenas dos días para adaptarse, disputó los 63 minutos en el estreno liguero de los blanquillos ante el Cádiz. Poco a poco se fue haciendo un referente en la zaga. Agresividad, solidez y liderazgo caracterizaron el juego de Vital durante la primera vuelta. No obstante, la etapa de Ramírez fue, como para todo el equipo, el peor momento de Vital como blanquillo.
Con el canario en el banquillo, la zaga titular no paró de cambiar. Jugó con 3, 4 y 5 defensores y nada le funcionó. En una de estas innovaciones, a Ramírez se le ocurrió cambiar a Vital de lado, y esto fue la sentencia para el portugués. Su partido fue desastroso y el entrenador lo castigó sin jugar tres jornadas en las que el Real Zaragoza cayó al más profundo de los abismos. Tras la esperpéntica derrota ante el Eldense, Vital regresó al once titular que firmó el desastre más absoluto en Almería, acabando con la era MAR.
Pese a ello, desde la llegada de Gabi las cosas han cambiado para Vital. Poco a poco ha ido saliendo del pozo y cada vez recuerda más al defensor total que fue y que se perdió por el camino. Ahora, junto a Jair, forma una dupla defensiva que parece intocable y que, de momento está dando resultados. El Real Zaragoza se enfrenta al final de temporada más complicado de su historia, y necesita más solidez defensiva que nunca. Con Vital de vuelta, lograr el objetivo será más fácil.