Desde el primer minuto, los de Jorge Palos salieron a mandar. Con una presión alta e intensa, el conjunto aragonés se adueñó del balón y del ritmo. Enseguida llegaron las ocasiones: Rivera estrelló un disparo en la madera y poco después Alberto Inés no logró concretar un buen remate al segundo palo tras una gran circulación colectiva.
El equipo se mantuvo volcado en campo rival durante la mayor parte del primer tiempo. La presión tras pérdida funcionó como un reloj, y permitió a los locales recuperar con rapidez y mantener la iniciativa. Solo algunos destellos individuales del Manzanares inquietaban a Dani Álvarez. Uno de ellos, un disparo cruzado de Pedro al palo, fue la más clara de los visitantes en el primer acto.
Segunda mitad más igualada, pero sin goles
La reanudación trajo un partido más equilibrado. Manzanares, necesitado de puntos para asegurar su permanencia en la categoría, subió líneas y planteó más batalla en la pista. Nacho Gómez avisó con un punterazo peligroso, y Rivera respondió con otro disparo que rozó el poste.
El tiempo corría, las ocasiones caían de uno y otro lado, pero el marcador seguía sin moverse. En la recta final, Manzanares tuvo la más clara: Raúl Campos se plantó solo ante Dani Álvarez, pero el portero zaragozano sacó una intervención providencial que impidió el tanto cuando ya se cantaba en la grada visitante.
Portero-jugador, intentos finales… y la fortuna que sigue sin sonreír
Con el empate en el luminoso, Wanapix fue a por todas en los minutos finales, arriesgando con portero-jugador. El empuje fue evidente, las llegadas se multiplicaron, pero el gol no quiso entrar. El equipo lo buscó por todos los medios, pero una vez más la fortuna fue esquiva. Esta temporada, ya son varias las ocasiones en las que los zaragozanos han hecho méritos más que suficientes para ganar… sin conseguirlo.
El 0-0 no refleja la entrega ni el nivel de juego mostrado por Wanapix, que suma un punto que sabe a poco tras haber dominado y generado con claridad. La afición, que respondió en las gradas, reconoció el esfuerzo del equipo con aplausos tras el pitido final.
