Zaragoza acogerá, por segundo año consecutivo, la Fase de Ascenso a División de Honor Oro, consolidándose como una plaza de referencia para el balonmano femenino nacional. El CDM Valdefierro será el escenario en el que cuatro equipos se disputarán, del 16 al 18 de mayo, el billete a la segunda categoría del balonmano femenino español.
El Club Balonmano Colores Zaragoza, anfitrión y uno de los candidatos, ejercerá de nuevo como organizador de esta fase decisiva. Junto a él, participarán el Lauko Ermuko Errotabarri, el OAR Gracia Sabadell y el Lleida Handbol, completando un cuadro competitivo y equilibrado.
Un grupo duro, pero con ilusión y factor cancha
Tras el sorteo celebrado este lunes 5 de mayo en la sede de la Real Federación Española de Balonmano, ya se conocen los emparejamientos del Schär Colores Zaragoza. El viernes 16 debutará frente al Lleida Handbol, equipo que llega como segundo del grupo C. El sábado 17 se medirá al Ermuko Errotabarri, subcampeón del grupo B, y cerrará su participación el domingo 18 contra el OAR Gracia Sabadell, campeón del grupo C.
A la espera de que la Federación confirme los horarios oficiales, la hoja de ruta del conjunto zaragozano ya está marcada: tres días, tres partidos, una sola oportunidad.
Cuatro equipos, dos ascensos
El sistema de competición es sencillo pero exigente: todos contra todos. Al término de la fase, los dos mejores equipos ascenderán directamente a División de Honor Oro. Una oportunidad única para que el Schär Colores Zaragoza dé un nuevo paso adelante en su ambicioso proyecto deportivo.
De los cuatro participantes, Colores y Sabadell llegan como líderes de grupo en la fase regular, mientras que Ermuko y Lleida fueron segundos clasificados. Llama la atención que todos proceden solo de dos grupos: el B, donde compitieron Colores y Ermuko; y el C, del que provienen Sabadell y Lleida.
Zaragoza, referencia en el balonmano femenino
Esta fase de ascenso no solo representa un premio deportivo, sino también un reconocimiento a la labor organizativa del CB Colores Zaragoza, que vuelve a asumir el reto de recibir a tres clubes más, sus aficiones y todo el entorno que acompaña a una cita tan importante. El respaldo institucional, la experiencia previa y la implicación del club han sido claves para repetir como sede.
El CDM Valdefierro se convertirá de nuevo en el corazón del balonmano femenino, con tres jornadas intensas de competición, emoción y ambiente deportivo. Zaragoza tendrá la oportunidad de empujar a su equipo desde la grada, como ya hiciera en la edición anterior.
La afición, el factor extra
Con el Schär Colores jugando en casa, la presión se convierte en motivación. La afición zaragozana tendrá un papel protagonista: llenar Valdefierro, animar sin descanso y convertir cada partido en una fiesta del balonmano. El equipo necesitará ese impulso en una fase donde cualquier detalle puede marcar la diferencia.
El sueño del ascenso está más cerca. Solo queda rematarlo en la pista.