El Real Zaragoza ha saldado sus dos desplazamientos consecutivos lejos de La Romareda sumando 4 puntos de 6 posibles. Un buen balance a estas alturas de temporada tan importante pero a la vez, tan complicada en cuanto a bajas, desgaste físico y sanciones acumuladas. Igbekeme sustituyó a Guti en el once inicial del Real Zaragoza, además de que Víctor Fernández dio entrada a Soro por Kagawa. Pocas novedades en cuanto al once inicial blanquillo y el sistema utilizado respecto al partido del Racing de Santander.
El papel del rival tampoco fue muy diferente, al menos, en los primeros 45 minutos. El Málaga tomó buena nota de la actuación de los de Oltra la jornada anterior en El Sardinero. Realizaron una presión alta y asfixiante sobre Eguaras. El navarro no podía sacar el balón jugado e Igbekeme, al que se le notó la reciente recuperación de su lesión, no imprimía la movilidad suficiente al juego del Zaragoza para poder realizar jugadas combinativas.
Tan solo un par de llegadas aisladas de Puado y Soro fueron las bazas que el Real Zaragoza pudo utilizar en ataque a lo largo de la primera mitad del encuentro. En cambio, el Málaga encontró en Juanpi a su jugador más peligroso. Se deshizo de Atienza en varias ocasiones e incluso puso en apuros a El Yamiq, el mejor defensa del Real Zaragoza una semana más. Los andaluces también volcaron su ataque por la banda defendida por Nieto.
El Málaga, peligroso a balón parado ante el Real Zaragoza
A todo ello hay que sumar el peligro malagueño a balón parado. Los córners fueron una constante sobre la portería de Cristian y hasta El Yamiq tuvo que sacar un balón sobre la línea de gol. La buena estrategia del Málaga se vio también desde los saques de banda con balones dirigidos directamente al área zaragocista donde los locales intentaban echar mano de sus buenos rematadores.
El descanso fue un soplo de aire fresco para el Real Zaragoza. Aunque el Málaga anotó gol en fuera de juego en el 48, tras ello los de Pellicer fueron notando el cansancio a medida que pasaban los minutos. El Málaga se vio perjudicado por el desgaste físico de los primeros 45 minutos y Soro, Burgui y Puado lo aprovecharon para romper la línea defensiva malagueña a base de velocidad, con rápidas contras.
Poca aportación desde el banquillo
Ambos técnicos movieron banquillo. Víctor retiró a Soro, uno de los más destacados en ataque, para dar entrada a Álex Blanco; mientras que Keidi Bare entró al terreno de juego por parte del Málaga. El partido entró en una fase de imprecisiones en la que ninguno de los dos equipos tuvo un dominio claro del balón. El Málaga se movía empujado por su afición y su ambición, el Real Zaragoza lo hacía con el corazón y la suerte del campeón.
Igbekeme fue retirado ante su falta de soberanía en el centro del campo para que Torres disputara los últimos 15 minutos de partido. Kagawa también entró en lugar de Burgui. Muchos cambios que no resultaron demasiado efectivos ni en uno ni en otro equipo. Al final, el partido se decidió en una jugada aislada bien aprovechada por el Real Zaragoza.
Nieto estuvo rápido ganando un balón dividido y asistió a Suárez para que este marcase el gol de la victoria en el 86. Un 0 a 1 en el que el Real Zaragoza no se lució, firmando por segunda semana consecutiva lejos de casa, un encuentro de pocas prestaciones en ataque, falta de mando en el centro del campo y más de un error defensivo que podía haber salido caro. La inspiración parece haberse evaporado lejos de La Romareda. A pesar de todo ello, a estas alturas de temporada lo importante son los puntos. Se consigan de una manera u otra, el Real Zaragoza sigue sumando y no se baja del ascenso directo.
