Espectacular. Crestas del Infierno volvió a ser un trail cinco estrellas. El tercer capítulo del calendario de carreras por montaña del circuito Pirineos Alto Gállego atrajo a más de 700 personas a Gavín para vivir una nueva edición de una prueba donde corredores, voluntarios y público profesan la misma fe. Cada uno a su manera. Los primeros transitando por unos bellos recorridos en busca de la meta, los segundos dándoles vidilla y los aficionados disfrutando de un día pleno de montaña y deporte.
El director de carrera Sergio Cazcarro puede estar (lo está) orgulloso de lo vivido en Gavín. A las 9 tomaron la salida los 238 corredores de la prueba de casi 30 kilómetros y 238 corredores que debían salvar un desnivel de 1.900 metros positivos. Quince minutos después lo hicieron los 200 corredores que cogieron dorsal para la prueba de 20 kilómetros y 1.200 metros de desnivel positivo y a las 9.30 lo hicieron los otros 200 corredores que participaron en la 10k y 700 metros de desnivel. Todos ellos durante una mañana fresquita, con previsión de temperaturas más bajas en las cotas más alta y cruzando los dedos por la posibilidad de que incluso nevara en un domingo 19 de mayo.
En chicos hubo un triunvirato en cabeza, con el castellonense Alberto Torres, Floren Aznar y Nacho Cabal pugnando fuerte y que cogió a los dos primeros a 5 kilómetros de meta. Desde allí y hasta el final pura emoción. Finalmente fue Nacho Cabal el que e hizo con el primer puesto por delante de Aznar y Torres.
En chicas, dominó la vasca Oihana Kortazar que afina y mucho de cara a la cita de Zegama. No dio opción. Acabó por delante de Mónica Sáez y Marta Gonzalbez, además de ser sexta en la general absoluta.