El Bada Huesca ya se encuentra en Cangas después de toda una noche de viaje en autobús. Descansa en el Hotel Airiños y por la tarde los jugadores estirarán las piernas sobre el 40×20 de O’Gatañal. Mañana es la vuelta del partido de Copa del Rey y la puerta de acceso a la Final a 8 será difícil de abrir. La renta de un gol del partido de la ida es exactamente equivalente a (casi) nada. Tampoco se jugaría tranquilo contra el siete gallego si hubiera sido de cuatro o de cinco goles. Por eso, la cita en O’ Gatañal tiene visos de final. En Galicia abre el Bada Huesca una semana de máxima exigencia. Tras el partido regreso a casa, el miércoles a Irún para jugar contra Bidasoa, regreso y el domingo, a las 12.15 contra el Valladolid. Y a la siguiente semana otro tanto en cargas de partidos. De locos.
Ante este calendario José Francisco Nolasco se refugia en el optimismo. Manda un mensaje de pleno respaldo a su tropa. Más cuando ha recuperado efectivos tras un nuevo paso del Covid-19 por la plantilla. Así se alista el zurdo Álex Marcelo con lo que los únicos que están en la enfermería son Sergio Pérez y Domingo Mosquera. Y es que no es para menos insuflar optimismo. Si el equipo sale bien de este febrero tremendo, pondrá velocidad de crucero.
Concentrados sobre el 40×20
El preparador del Bada Huesca califica de «especial» estar en la Final a 8 de la Copa del Rey. El problema es que Cangas es un buen equipo. Llega a la cita tras empatar en casa contra Bidasoa en partido de la Asobal. La radiografía de Cangas la tiene clara: «Si consigue hacer su balonmano va a ser muy difícil. Vamos a tener que hacer bien las cosas, estar muy finos, intensos y metidos al cien por cien en lo que pasa en la pista. Su público mete mucha presión y más cuando está en juego lo que está».
El técnico reconoce que si bien ha recuperado a casi todos sus jugadores, la realidad es que tampoco los entrenamientos han sido de la calidad necesaria debido a la falta de jugadores. Si a eso se le añade que el ritmo de competición desde la pretemporada de invierno ha sido escaso, hay cierta incógnita por saber la respuesta del bloque. «Va a ser muy complicado y no nos debemos dejar influir por el ambiente», subraya Nolasco.