ZARAGOZA| “Y entre los muertos habrá siempre una lengua viva para decir que Zaragoza no se rinde“. Esta es la última frase del reconocido párrafo que pertenece a la novela “Zaragoza”, dentro de los famosos Episodios Nacionales de Benito Pérez Galdós. Siempre se vincula al Real Zaragoza y al Casademont Zaragoza y, si hay un equipo que la representa mejor que nadie, es el equipo dirigido por Carlos Cantero. Y el partido de este pasado miércoles ante Fenerbahçe (69-80) fue la enésima demostración; frente a cualquier dificultad, de que este equipo siempre da la cara y nunca se rinde.
Nada es capaz de frenar la lucha y la resiliencia de las rojillas. Ni el primer cuarto contrario de 11-26, ni la lesión de Markeisha Gatling en el minuto 4 de partido, ni la clara superioridad rival. El esfuerzo es innegociable en este equipo. Carlos Cantero esto lo tiene muy claro: “Yo creo que la gente ha visto nuestro esfuerzo, cómo nos hemos levantado tras la lesión de Gatling y las dos faltas de Nystrom y nos hemos vuelto a meter en partido”, afirmó el madrileño en la rueda de prensa posterior al duelo.
El día de Nerea Hermosa
Fenerbahçe aún no había empezado a coger una buena distancia cuando llegó el primer problema. Markeisha Gatling tuvo que dejar la pista debido a unas molestias de rodilla. “Se ha quejado de un dolor en la rodilla, pero es cierto que acarrea desde hace días una sobrecarga“, explicó el técnico rojillo. La preocupación era y es máxima en el entorno, pero, en vez de venirse abajo, el equipo respondió y en especial una jugadora: Nerea Hermosa.
La vitoriana no ha tenido su mejor inicio de temporada, pero en el día de ayer estuvo excelsa. Con 12 puntos y 9 rebotes para 18 créditos de valoración en 30 minutos, fue la mejor de las locales y la segunda jugadora más valorada del partido junto a, ni más ni menos, Emma Meesseman y solo por detrás de Julie Allemand (20). No se escondió, sino todo lo contrario y su entrenador se lo reconoció tras el choque. “Hay que resaltar el trabajo de Nerea con 30 minutos en pista (…) Necesitamos que ciertas jugadoras den ese pasito adelante y que hagan un partido así“.
Nerea Hermosa no fue la única responsable del buen partido de su equipo. Mariona Ortiz, en la oficina, un día más. La catalana fue muy sólida con 6 puntos, 4 rebotes y 6 asistencias para 15 créditos. Ambas estuvieron muy bien secundadas por Ellen Nystrom y Helena Pueyo. La polivalente sueca va a más y ante Fenerbahçe no fue menos, anotando 13 puntos en 17 minutos. Por último, las dos partes de Helena Pueyo. La balear estuvo muy discreta en la primera parte, pero se resarció en el segundo tiempo cuando anotó, prácticamente, la totalidad de sus 15 puntos.
3-1 en parciales
En el plano general, el conjunto aragonés no se arrugó y, pese a un primer parcial doloroso (11-26), se rehizo y, a partir de ahí, ya fue hacia arriba. Tras el abultado resultado de los primeros 10 minutos, el Casademont ganó los tres cuartos restantes. Por la mínima, sí; pero se los llevaron: 11-10, 25-23, 22-21. El conjunto zaragozano afrontó el choque como 4 mini partidos de 10 minutos y Carlos Cantero se marchó satisfecho con ello. “Me joroba perder, pero, en ese enfoque de intentar que cada 10 minutos sea un partido nuevo, me voy contento, porque hemos ganado 3 de 4 partidos“, comentó Cantero.
Algo similar ocurrió en el partido de ida disputado en Istanbul. No ganó ningún parcial; perdió 3 y empató 1, pero la dinámica de partido fue la misma. Tras también perder de manera clara el primer cuarto (23-9), el resto de parciales fueron muy igualados: 25-23, 23-23, 13-9. Mucho tiene que ver ahí la clara diferencia de plantilla, jugando ante estrellas mundiales como Meesseman, Allemand, Gaby Williams, Tina Charles o Ariel Atkins. Por tanto, la conclusión es clara: a las rojillas les ha costado entrar en el partido, pero a partir de ahí se ha competido muy bien.
ASÍ, este equipo nunca se da por vencido. Siempre alentadas por una marea roja que no dejó de animar y que transmitió el mensaje claramente cuando el partido estaba abierto: Zaragoza nunca se rinde. Y este Casademont, tampoco.
