Cheick Doukouré es uno de los pocos jugadores que se han visto beneficiados con el parón de las competiciones, puesto que ahora es un activo al mismo nivel que los demás jugadores de la SD Huesca. Su lesión de rodilla, con sus recaidas y problemas musculares, le habían apartado del equipo más de lo esperado, pero con este parón ha vuelto al 100%.
De esto no solo ha dado cuenta él, sino que muchos de sus compañeros han explicado como de bien ha vuelto a los entrenamientos. Pedro López, en la entrevista que le realizamos en YouTube, o Ferreiro, han confirmado las sensaciones: «Se le ve sonriendo, sabemos que va a ser un gran fichaje. Creo que va a dar un rendimiento muy bueno».
Y es que la SD Huesca no recupera un jugador más para su causa, sino que Doukouré viene a reforzar la zona más endeble del campo. Con las salidas de Musto y Seoane o el fichaje fallido del coreano Ki Sung-Yueng, la posición de pivote estaba despoblada. Mosquera y Mikel no han rotado apenas en todo lo que va de temporada y, aunque las lesiones les han respetado, encarar una competición con partidos cada 72 horas sin recambios se antojaba complicado.
Y ahí es donde aparece Cheick. El joven costamarfileño rindió bien la campaña pasada en el Levante en esa posición y aquí podrá aportar músculo y seguridad defensiva al equipo. Ya sea como titular, sustituyendo a Mosquera o jugando a la vez con él en un centro del campo más conservador, es un jugador de lo más aprovechable para Michel, que deberá plantearse muchos rompecabezas con tantos partidos a jugar en tan poco tiempo.
Al ritmo de sus compañeros
Doukouré se siente feliz y así lo ha demostrado en al rueda de prensa de hoy: «Después de haber pasado todos estos meses en el gimnasio, es un lujo poder completar todo una semana al ritmo de mis compañeros y sin molestias. Es una sensación que no se puede explicar».
«El objetivo es recuperar mi mejor nivel y estoy trabajando duro para ello. Cuando esté listo para dar ese 100%, tengo ganas de aportar todo lo que pueda la SD Huesca. Estoy muy contento con el club y la afición y quiero agradecerlo enormemente«, confesaba.
El costamarfileño confía plenamente en la plantilla y en su nivel para «acabar lo más arriba posible». Para ello, el equipo debe de estar muy concentrado los once partidos que quedan «sin importar que no esté el calor de la afición».
