Casi se sorprende cuando se le pregunta si ha firmado su continuidad en el banquillo del BM Huesca. Nolasco tiene claro que seguirá. Ha forjado una relación con el presidente, Pachi Giné, donde la palabra, el apretón de manos, está por encima de la firma de un contrato. Y el ilicitano ya prepara su campaña 13. Tiene sus manías, sus supersticiones, que desliza fuera de la conversación oficial, pero entre ellas no se encuentra el número 13. Y con él se sentará quienes conforman el cuerpo técnico en la campaña ya finiquitada.
Siempre defiende que mientras el club mantenga el “espíritu competitivo” estará en Huesca. Luego matiza. O intercambia el adjetivo por un sustantivo. Prefiere denominarlo “reto”. Y esta temporada le tocará reinventar el equipo, con menos presupuesto y a las puertas de que la Asobal se profesionalice. (Hoy, el presidente y el directivo José María Udina participan en una reunión para tal efecto).
Hay cierta idea de que el Bada Huesca está obligado a quedar siempre de la mitad de la tabla hacia el norte. La exigencia, siempre está allí. Ha calado que lo contrario, es fracaso. Y menos mal que esto es deporte. Porque si fuera por presupuesto… Si fuera por presupuesto estaría peleando siempre por la permanencia. Y por eso, Nolasco no esconde el orgullo que supone pugnar contra Ademar, Logroño, Bidasoa, Granollers, Cuenca…
El nuevo equipo se ha dejado jirones. El abono de las cláusulas de Asier Nieto y Sergio Pérez le ha descuajeringado cierta idea de balonmano. El vasco está llamado a ser un jugador importante y tras dos años de orfebrería, Nolasco no esconde que ahora que “lo íbamos a disfrutar más”, se va. Recaló en Bidasoa y se supo poco antes de jugar contra los vascos. El central madrileño es singular. Nada que ver a cómo vino y a cómo se va. En Huesca se moldeó para recalar en la liga francesa.
Las cláusulas siempre flotan como una amenaza. El pago de la de Sergio se supo a principios de año y dio tiempo para buscar recambio. Calla con los refuerzos. Ni confirma ni desmiente la llegada de Dijà e Ignacio Suárez, pero desliza una catarata de ofrecimientos para engrosar la nueva propuesta de juego del Bada Huesca 2022/23. Sí que muestra cierto disgusto con el tema cláusula, pero es lo que hay. “Me hubiese dolido que se hubieran ido a un club del mismo nivel que el nuestro”, señala, y matiza que se van “porque han querido”. Defiende el contrato y si alguien quiere a un jugador “negociar”.
Un lío de la temporada fue el caso Almeida. El portero se ausentó muchas jornadas por un tema de visado cuando el club había hecho un importante esfuerzo en contar con sus servicios. En este punto, Nolasco matiza que “la palabra no es decepción. Lo que hay que preguntarse es si ha rendido en función de lo esperado. Y no ha sido así. El cachet que creíamos que teníamos es el que debe de tener, pero aquí no lo demostró más que con cuenta gotas”. Y es que la portería del Bada Huesca, esta temporada, ha estado entre las medias bajas de la Asobal.
Los datos que maneja el cuerpo técnico así lo atestiguan. No solo hay que quedarse en los porcentajes absolutos. Cuando se espigan esos datos, cuando se separa el binomio defensa/portero, el resultado es que la portería no ha estado al nivel esperado. Para la próxima campaña, Tercariol aparece como pareja de Dani Arguillas, aunque Nolasco tampoco se pronuncia sobre la posible llegada del brasileño.
Uno de los jugadores que más le han sorprendido esta temporada y que desconocía es el lateral izquierdo de Nava Jakub Prokop y respecto a jugadores que han crecido pone nombre propio a Pol Varela y Agustín Casado «del que fue una lástima que no lo pudimos tener más aquí porque él no quiso. Su concepto de balonmano era distinto al que tiene ahora».
Para la próxima temporada, los zuros del lateral derecho son plena garantía. Mosquera firmó una gran temporada hasta su lesión en Logroño y Père Arnau saltó por los aires esa idea de que es necesario un tiempo de adaptación. Puro caviar.
Niega que la próxima temporada -está previsto amistosos de nivel como contra el Barça y Bidasoa- «sea cambio de ciclo» y sí que todos los años le da «cierto vértigo» que la competición «sea tan complicada como esta. Por pequeños detalles no hemos estado más arriba o más abajo. Nos han empatado partidos yendo ganando y hemos perdido yendo ganando. Hemos sido los que más partidos hemos empatado. Por nada no hemos ido a Europa», subraya.
La profesionalización de la liga la entiende como «un nuevo camino que hay que aprovechar. El CSD (Consejo Superior de Deportes) ya ha dado su visto a la petición de la Asobal con lo que la Asociación quedará desligada de la Federación.