Pulido volverá al eje de la defensa del Huesca este domingo, en Burgos. Lo acaba de confirmar Nacho Ambriz en la rueda de prensa donde ha analizado el juego de su equipo contra el Málaga. El técnico se ha quedado con la primera parte desplegada por sus chicos. Ha insistido en el buen juego y en la necesidad que veía de poner sobre el prado al Huesca de las tres primeras jornadas de la competición. “En la primera parte hemos manejado bien la pelota”, ha dicho, y reconoció que en el cómputo general los dos equipos crearon ocasiones para hacerse con el partido.
Preguntado por los cambios, Ambriz sostuvo que fueron para dar a su equipo un sentido más ofensivo. Quería que su equipo saliera a comerse el encuentro. El hecho de que el Huesca no consiga los tres puntos en El Alcoraz desde finales del pasado mes de agosto le sirvió para espolear a sus jugadores en la charla previa al encuentro, reconoció. Pero no fue suficiente.
El empate impide añadir tres puntos más en el casillero del Huesca. Conseguirlos tras la victoria en Girona hubiera sido muy importante, pero no pudo ser. Y es que en el segundo acto, el Huesca se diluyó ante un Málaga que empujó más. ¿La razón? “Nos faltó la movilidad de la primera parte y el partido entró en un ida y vuelta”. Preguntado por la polémica jugada que el VAR anuló y hubiera supuesto la victoria del Málaga, Ambriz se escudó en que estaba muy lejos. “No sé la interpretación que han hecho los árbitros, pero E, recalcó.