Y es que las cosas se pusieron de cara para los azulgrana después de adelantarse por mediación de Raba nada más comenzar. Sin embargo, los minutos pasaron y el Huesca no supo sentenciar el encuentro. Algo que acabó pagando en el tramo final. Primero, con el empate, y después, con el penalti que significaría el 2-1. Una situación, según el preparador, condicionada por no haber sido lo suficientemente «agresivos» en ataque como para hacer el segundo.
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«Con 0-1 el rival no se va a rendir nunca», insistía Míchel, sobre una Cultural que ha superado a la SD Huesca en el tramo final. Del mismo modo, ha elogiado la actuación del cuadro leonés. «El rival no era un rival fácil», apuntaba. Después de la derrota llegaba también el momento de evaluar a los suyos. «Ningún jugador me ha decepcionado», aseguraba el entrenador del conjunto altoaragonés, que destacaba también su «actitud» pese a no haber superado la eliminatoria.
Una decepción para el vestuario
Caer eliminados de la Copa del Rey a manos de la Cultural ha supuesto una decepción para el vestuario de la SD Huesca. Su entrenador destacaba que no le consuela poder centrarse únicamente en Liga, ya que la Copa era una competición donde podían tener oportunidades los menos habituales. «La plantilla es amplia y necesitamos seguir compitiendo todos, hoy era necesario pasar», añadía.
La otra noticia negativa de la noche fue la lesión de Pedro López. El lateral tuvo que retirarse en la segunda mitad por un golpe en el gemelo.
El mercado no preocupa a Míchel
La actualidad del Huesca pasa también por el mercado de fichajes. Una cuestión que Míchel tratado en segundo plano, alegando que no es algo que le preocupe más que lo puramente futbolístico. «No sé los que se pueden ir, no sé los que pueden venir», afirmaba. Eso sí, no ha pasado por alto la necesidad de reforzar tanto el mediocentro como la delantera.