El Real Zaragoza vive los días más intensos de la temporada y quizá de los últimos tiempos. Tras una semana llena de noticias, el club anunció en su página web un movimiento que pretende ser definitivo. En el comunicado se informa de que el accionariado cerrará en los próximos días un acuerdo con un grupo inversor internacional de «probada profesionalidad y solvencia». El movimiento y «la entrada de un nuevo propietario» permitirá, según el club, «impulsar el proyecto a largo plazo y refinanciar la deuda del Real Zaragoza».
La noticia llega en la víspera de un día señalado, en un clima cada vez más tenso. La Federación de Peñas y los grupos más simbólicos de animación han programado una protesta para la previa y el desarrollo del encuentro ante el Valladolid. También el comunicado recoge alusiones veladas a la manifestación de mañana: «Desde el club se comprende y asume la lógica inquietud que la actual situación provoca en muchos abonados, socios y aficionados». Y ante esa preocupación, proponen una receta: «unidad y serenidad», el respaldo de la grada. Y lo demandan para una hinchada que siempre estuvo allí, «tanto en las buenas como en las malas».
📯 | Comunicado oficial del #RealZaragoza
— Real Zaragoza 🦁🤍💙 (@RealZaragoza) January 21, 2022
A poco más de 24 horas para un duelo estratégico ante el Valladolid, el zaragocismo recibe la noticia con recelo. Nada parece casual o inoportuno. La propiedad, dividida hasta anteayer, ha limado sus diferencias a contrarreloj. En el escrito llama también la atención la inminencia, ante la previsión de que la oferta se cierre en «los próximos días».
El duelo ante el Valladolid empezó a disputarse hace tiempo. Y en el encuentro en Romareda habrá muchos partidos en juego.