Una cuestión de eficacia. La SD Huesca tiene contra el Tenerife una buena oportunidad para firmar otros 90 minutos de buen juego. La victoria contra el Elche se facturó con buen fútbol. Ahora se quiere seguir en esa línea en las islas. El rival es de los que propone juego, de los que les gustar tener el cuero y de los que sufren cuando carecen de él. Guarda ciertas simetrías con el Huesca, aunque les separen varios puestos en la clasificación.
Míchel sigue fiel a su discurso. Jornada tras jornada no cambia. Lo podrá decir de una u otra forma, pero el contenido es invariable. Plena confianza en todos los jugadores de su plantilla, más que satisfecho con los entrenamientos de calidad e intensidad; dominio del balón, recuperación tras pérdida… Todo se resume en el trabajo, trabajo y más trabajo para perseguir lo que le ha faltado en algún encuentro: eficacia. Gol.
Es consciente el entrenador del Huesca que al equipo le falta abordar con más aplomo los partidos lejos de El Alcoraz. «Fuera de casa hay que ser más fiable, ser más eficaces y profundos», acaba de comentar en la rueda de prensa previa antes de partir rumbo a Tenerife. «Nos ha faltado eficacia en la portería contraria y con gol en contra nos hemos precipitado», añadió.
Tenerife será otro rival incómodo. Como todos los de esta Segunda División. Otra vez se presume un partido de brega contra un rival al que le gusta la posesión y que, si bien no ha conseguido los resultados deseados, tiene fútbol. Míchel tiene, con la excepción de Insua, Doukouré y Pedro, a todos sus jugadores en disposición para entrar en la convocatoria. Del once inicial no fijó nombres, aunque deslizó que «lo normal es que un jugador con rendimiento continúe».
