HUESCA | El gol con el que Bada Huesca cerró la victoria ante Valladolid llevó el sello de Miguel Malo. El central oscense cuajó un partido excelente. Eso sí, asegura el canterano que no fue el mejor desde que defiende el escudo del siete altoaragonés, aunque eso pudiera parecer. Por ese gol, por los siete metros sin fallo, por el porcentaje de acierto ante la portería castellana, pero… Pero siempre hay un detalle que mejorar. Un ‘algo’ que hubiera valido para ser el mejor partido. Y lo encuentra en que le hubiera gustado haber estado «más minutos en defensa». «No es el partido -apostilla- del que me he ido más contento».
Y es que el canterano y uno de los capitanes de este Bada Huesca desliza que «me gusta el barro». Vamos que le encanta frenar al rival, ponerse el mono de faena y ser un ladrillo en el 6:0 del Bada. Ya se sabe que en este, como en otros deportes de equipo, las victorias se aquilatan desde la defensa. «Contra el Valladolid ganamos desde la defensa. Y contra Logroño, otro equipazo, este viernes, en el Palacio y con nuestra gente tendremos que ganar desde la defensa», recalca.
En un equipo como el altoaragonés que se caracteriza por ser bloque a Miguel Malo le cuesta entrecomillar protagonismo alguno tras el partido contra Valladolid. Recibe a sportaragon.com tras el entrenamiento del martes, el primero de la semana. Ha sido tras dos horas y media intensas sobre el parquet. El mejor ejemplo de que el equipo está bien engrasado, porque «aquí nadie es imprescindible», suelta tajante. La última semana y media de enero fue buena. Entrenamos muy bien, con intensidad», apostilla Malo. Eso sí, el foco está en ese gol 27 y en los dos siete metros anteriores con las cosas muy ajustadas en el electrónico, en el Huerta del Rey donde ancla el quinto clasificado de la ASOBAL.
Fortaleza mental
Malo ha vuelto a ver el partido contra el Valladolid. Siempre revisa los encuentros jugados para detectar fallos, para mejorar. Y claro, ha visto ese gol que sirvió para firmar una victoria importante y, confiesa que ese tanto, el 27 del Bada «varias veces». Más cuando se reanuda una ASOBAL tan apretada. La victoria le deja la quinta plaza que guardan los castellanos a tres puntos y ya ponen siete de por medio con Cangas. En enviar la redonda a la red rival tuvo un papel clave sus dos últimos siete metros, vitales, con enorme responsabilidad porque no se podía fallar. «Hace un par de temporadas, contra Anaitasuna fallé uno en el minuto 57 o 58 porque no tenía la confianza o fortaleza de cabeza que tengo ahora. No es que sea un veterano, pero estoy con un nivel de confianza de que no pienso qué minuto es. Ojalá siga con esa confianza», señala Miguel Malo.