El Real Zaragoza tiene pocos recursos para llegar a la meta rival. Así lo ha venido demostrando a lo largo de toda la temporada, en la que ha marcado 26 goles en 31 jornadas. De media, el equipo zaragocista no es capaz de marcar ni un gol por partido. Las cifras goleadores de los blanquillos solo son empeoradas por otros 4 equipos de la categoría, todos ellos en la zona baja y entre ellos el colista, el Albacete.
De los 26 goles del Real Zaragoza, Narváez suma 9 tantos, mientras que los otros 17 se reparten entre el resto de la plantilla. Solo James, con dos dianas, ha marcado en más de una ocasión. El Real Zaragoza ha probado de todo para intentar mejorar en ataque: volcar su juego por banda, intentarlo con balones largos, buscar pases en profundidad por dentro o exprimir al máximo el balón parado. Ninguno de estos recursos han podido hacer que el bagaje goleador del equipo mejorase.
Narváez, el único delantero con gol
Álex Alegría solo ha sido capaz de marcar gol en una ocasión, a pesar de la reiterada confianza que JIM ha depositado en él desde el mismo momento de su llegada. Ante ello, la falta de oportunidades para Azón y la incapacidad anotadora de Vuckic y el «Toro», solo queda un recurso en el ataque zaragocista: volcar todos los esfuerzos del equipo en buscar balones al pie de Narváez.
El colombiano no es solo quién más goles marca, sino también es el jugador que más disparos lanza contra la portería contraria, un total de 21 esta temporada. El problema para Narváez llega cuando no tiene un compañero que le suministre esos balones para poder generar ocasiones de peligro. El colombiano tiene movilidad, desborde y desmarque, pero necesita un socio en el centro del campo.
En sus momentos de inspiración, Eguaras ha estado ahí para intentar conectar con la línea más adelantada. Sin embargo, la irregularidad del navarro no juega a favor del equipo. Francho es el jugador que mayor nivel y regularidad había mostrado esta temporada para desempeñar ese papel de pieza de conexión entre el centro del campo y el ataque. Su baja por coronavirus le ha dejado algo tocado y aunque su presencia en el campo siempre se nota, de momento no ha recuperado la chispa que tenía antes de sus semanas de ausencia.
Zapater, el socio perfecto
Cuando Francho se lesionó, ahí apareció Zapater. El capitán está viviendo una de sus mejores etapas desde que regresó al Real Zaragoza. Una pena que el rendimiento del resto del equipo no le acompañe. Su papel, sea por su estado de forma o por la competencia con otros compañeros en el centro del campo, siempre se ha puesto en entredicho en las últimas temporadas. Ahora la historia es muy diferente.
Zapater ha logrado unificar a todo el zaragocismo bajo una misma opinión. La afición tiene claro que el capitán debe ser el buque insignia del equipo para sacar esta situación adelante. Su liderazgo en el vestuario siempre ha sido un hecho indiscutible, pero ahora Zapater ha dado un paso al frente decisivo erigiéndose también como la gran figura de referencia en el centro del campo del Real Zaragoza.
Lleva tres jornadas siendo el mejor del equipo y así lo están reconociendo los lectores de SPORTARAGÓN que, por tercera semana, lo han elegido como el MVP del partido con casi el 60% de los votos. En esa votación, Narváez ocupa la segunda posición. Ambos, Zapater y Narváez, protagonizaron la jugada del gol ante el Logroñés. Una jugada en la que Zapater puso un balón magistral a Narváez para que el atacante definiese a la perfección.
La salvación hasta no hace mucho parecía antojarse como un milagro. Ahora, Zapater y Narváez, han devuelto la esperanza. Dos referentes que despliegan su magia en los momentos decisivos en búsqueda de una salvación que significa la vida para un maltrecho Real Zaragoza.
