Iñigo ‘Iru’ Iruretagoiena es un tipo con nervio. El vasco afincado en Villanúa busca detrás de la cámara otro punto de vista en los documentales de montaña. La cima es el objetivo. Pero no el único. Le gusta trasladar otras cosas. Dar a conocer distintas realidades. Cosas que uno sabe porque se la han contado, pero que, en ocasiones, cuesta creer. Es una propuesta donde la aventura hasta el Campo Base, en ocasiones, tiene más substancia que la ascensión. Son situaciones dominadas por la sorpresa. Por ejemplo, los 3 dólares que cuesta una bala en Anchorage (Alaska) y las tiendas inmensas de material con todo lo imaginable en el estado más septentrional del país de las barras y las estrellas. Que te cuente cómo los ranger están camino al Denali y controlan o el golpe de realidad de esa América con un tipo a los mandos de un quad y un pistolón en la cintura.
Otra cara de las montañas
