David Gómez, técnico del Levitec Huesca, no dudó en ensalzar el potencial del rival. La verdad es que lo hace así cada vez que habla de la siguiente cita de su equipo. No hay equipo al que se encadene y del que no destaque sus fortalezas. Su Levitec Huesca llegará después de una buena semana de entrenamientos, desterrado de su cabeza el resultado contra Castelló -«fue un partido de inflexión para nosotros», defiende-, pero con la lección aprendida de lo que ocurrió. Más que nada porque se mide este domingo a un Força Lleida que ganó al Castellò. Por lo tanto, si se hace una derivada, el resultado es para tener máxima precaución.
Hay una idea clara por encima de los nombres del quinteto catalán. Juegan fuerte, muy fuerte, al límite. Y eso es un buen preaviso de la propuesta del Peñas. Contra fuerza, fuerza. Te podrán ganar en canastas los Bulic, Feliu, Polanco Tavarez, Chapela, Lucas N’Guessan o, especialmente, el inmenso Buchanan, pero en intensidad no. En este aspecto del juego, como mínimo, el equilibrio.
«Lleida es un rival directo. Es de nuestra liga por lo que hay que salir con mentalidad de eliminatoria. Los jugadores tienen que saber que no es un partido más», acota David Gómez.
