La primera acción más que dudosa llegó nada más arrancar el segundo acto, cuando el árbitro señalaría penalti por mano de Josué Sá. El VAR llamó a Ais Reig para que este la fuera a revisar a la pantalla pero no cambió su decisión. «No hay un penalti que se haya pitado en esas circunstancias en los dos años que llevamos de VAR», reconocía Míchel. En relación a ello, el míster también aseguraba que «creo que le han dicho que fuera a verla porque no es penalti. Esa jugada no es penalti. No sé por qué lo ha pitado». Más de uno se pregunta qué criterio ha seguido el árbitro para pitar lo que ha pitado. Igual que Míchel, que apoya a los árbitros porque «al final te quitan y te dan, pero hoy no hay ningún tipo de polémica en el penalti. No lo entiendo».
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Al margen de la jugada polémica del penalti, el técnico azulgrana ha reconocido que «en un partido muy disputado, a nosotros no se nos ha permitido tener esa intensidad». Por todo ello, «no me ha gustado cómo ha medido la intensidad de los dos equipos de la misma forma. Nunca hablo de árbitros pero hoy sí me siento perjudicado».
De la misma manera, cree que «el Rayo nos puede ganar, es un gran equipo con intensidad. Nos ha metido el golazo; el dos a cero. Pero desde luego ha condicionado el partido y el penalti no se puede pitar».
Buena imagen del equipo
El Huesca ha mostrado una mejor imagen con respecto a las últimas lejos de El Alcoraz, con más intensidad y verticalidad, Míchel reconocía que «no sé si nos hubiéramos llevado algo o no, porque los dos equipos hemos tenido opciones, pero nosotros también, hemos sido más verticales que en otras ocasiones».
Ahora solo espera que esta derrota «no nos condicione» y se queda con lo positivo: «la propuesta del equipo y el rendimiento ha sido bueno. Es una base para seguir. Nos tenemos que levantar». Para concluir, ha agradecido a la afición rayista la bienvenida que le han brindado en la noche de hoy. «Me siento vallecano y soy rayista», concluía.