La SD Huesca no cumplió con las expectativas en Los Pajaritos, donde perdió ante el Numancia.
En el partido disputado en Los Pajaritos, Rubi formó un once con algunas de las nuevas caras queriendo dar un toque renovado al juego del Huesca. Sin embargo, el planteamiento no salió como el técnico quería, pues el equipo no se sintió un bloque en ninguno de los 90 minutos que duró el asalto entre rojillos y azulgranas.
La primera parte fue una toma de contacto en competición oficial y pese a que era un ida y vuelta continuo, el Numancia se sintió mucho más cómodo sobre el verde que los azulgrana y reflejo de ello llegaron varias ocasiones rojillas. El Huesca también tuvo un par de oportunidades para irse por delante en el marcador en el descanso, pero era el conjunto local el que ponía más ímpetu a la hora de acercarse al área rival. Así fue que Remiro evitó que el conjunto soriano se fuera con ventaja al tiempo muerto.
En la segunda mitad volvió la monotonía del Numancia y se veía a un Huesca desubicado en el terreno de juego. En los primeros compases no se conseguían hacer más de tres pases seguidos por parte de los azulgrana y de ahí vino el único gol del encuentro que consiguió Pere Milla para adelantar a los locales.
Rondando el minuto 54 Carlos David vio una segunda amarilla muy rigurosa que lo mandó directo al vestuario posiblemente fruto de la impotencia de juego que sentía el equipo oscense. A partir de ese momento Rubi comienzó a mover el banquillo obligado a recomponer el esquema, sacando a Pulido para ocupar el hueco que dejaba el de Mérida.
Las sensaciones con diez futbolistas sobre el verde seguían siendo las mismas pero a partir del paso de los minutos y con la entrada de Rescaldani el equipo empezó a carburar levemente dando una mejor imagen que en los anteriores 75 minutos. Con ‘Cucho’ más liberado, el conjunto azulgrana quería mover más el balón y es que la frescura y actitud del joven jugador colombiano dieron otro aire al juego oscense.
Tanto destacó en el campo ‘Cucho’ que parecía el único que conseguía moverse con libertad sobre el campo, filtrándose entre líneas, recibiendo y moviendo prácticamente a casi todo el equipo. Y llegó la ocasión del Huesca que ponía el empate en el marcador. Sin embargo, el línea dictaminó que el tanto no contara por un supuesto fuera de juego de ‘Cucho’ que realmente no existía.
Teniendo en cuenta que aún estamos en agosto y solo llevamos un partido de la competición regular, el equipo no es un desastre pero Rubi tendrá que hacer cambios y dar con la tecla para que esta máquina vuelva a jugar a aquel buen fútbol en el que tanto incidió el ex entrenador del Huesca, Juan Antonio Anquela, en su día.