Casademont Zaragoza pierde ante Valencia Basket por 88 a 76 y los de Mumbrú sellan su viaje a la Copa del Rey en Badalona. El conjunto de Fisac fue capaz de maquillar el resultado final tras un partido sonrojante en todos los ámbitos del juego. Con esta derrota ya son 13 en 17 partidos.
Casademont Zaragoza sorprendió a los taronjas en el principio de encuentro. Hlinason y Jovic empezaron generando grandes ventajas ofensivas mediante el «pick and roll». Con el serbio en pista, los maños dieron una gran versión en ataque, puesto que Jovic brindó de claridad y orden a los rojillos. En defensa, el equipo fue capaz de estar en sus medias en cuanto a rebotes y de forzar varias pérdidas a los de Mumbrú. La dinámica cambió con la salida del banquillo. La salida de Stefan y Tryggvi perjudicó la dirección del equipo. Los rojillos fueron incapaces de encontrar sentido al juego, la organización era escasa y el equipo acumuló excesivas pérdidas (8) en el primer parcial. Todo ello, un 1/4 en tiros libres y la acumulación de fallos provocaron que el electrónico se posicionase 23-14 al término del primer cuarto.
La crisis del cuidado del balón continuó en el segundo cuarto. La sangría era continua. Los de Porfirio fueron incapaces de tener una consistencia ofensiva que les permitiese acercarse en el marcador. A su vez, el nivel defensivo se redujo todavía más. Los taronjas acribillaron desde el 6,75 a Casademont Zaragoza con 5 triples anotados en el segundo cuarto. El cuadro maño estaba decaído, no lograba acercarse en el marcador, si no al contrario, la falta de acierto mermaba las esperanzas de los aragoneses.
Los datos eran aterradores para Casademont Zaragoza: 2/8 en triples, un tiro libre anotado y 12 pérdidas. Además, la sensación que dejaba el equipo era de falta de garra, de ambición. La intensidad brillaba por su ausencia. Por suerte, Aday Mara tuvo un momento de brillantez a final de cuarto, con dos canastas consecutivas que recortaban la distancia a 11 puntos. Porfirio Fisac tenía una labor realmente difícil en el descanso, puesto que los errores eran múltiples. El encuentro se marchaba 42-31 al descanso.
Aday y Stefan nos han regalado esta conexión antes del descanso 😮 pic.twitter.com/5GyfvF9UGY
— Casademont Zaragoza (@CasademontZGZ) January 22, 2023
El descanso no surtió efecto. Casademont Zaragoza parecía haber dado por perdido el encuentro desde el segundo cuarto. Este cuarto fue desolador para los maños. El conjunto era «un equipo sin alma». Las pérdidas no cesaron, la intensidad no subió, y además, Valencia Basket formó un auténtico huracán ofensivo en este parcial (7/11 en triples, 3/5 en tiros de dos y 5/5 en tiros libres). Tiros a media distancia, triples… los taronjas mostraron una exhuberante superioridad cualitativa respecto a Casademont Zaragoza. En este cuarto, Howard Sant-Roos, además, sufría una preocupante lesión en la muñeca.
La defensa de los maños era insuficiente. Fisac probó defensas individuales, zonas…todo ello, ineficaz. El encuentro se marchaba 74-49. La paliza era abrumadora. Por otra parte, Shannon Evans hizo su debut en este cuarto con los valencianos, con una entrada entre aplausos.
Valencia Basket remató la faena en el último cuarto. La dinámica era calcada a lo ya visto. Los de Mumbrú jugando en dulce y los de Fisac, sumidos en un mar de males. En este cuarto, los maños alcanzaron las 22 pérdidas. Un dato demoledor que refleja la absoluta incomodidad en ataque que sufría el equipo. Casademont Zaragoza maquilló el resultado, algo importante de cara al «basket average». Jessup, Javi García, Aday Mara y Ponitka fueron los artífices de ello. El resultado final del encuentro fue 88-76, que le daba a Valencia Basket vuelo directo a la Copa del Rey de 2023 de Badalona.
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