Hace una semana se oficializó la incorporación de Fernando Barceló al Team Cofidis, una incorporación a la que el oscense la añade mucho valor: «Tiene una trayectoria muy buena. Seguramente es el mejor equipo en el que pueda estar ahora mismo. Cuenta con muchos corredores y muy buenos y eso siempre te puede hacer progresar, aprender cómo actúan, por ejemplo, Viviani, Herrada, Laporte. Y, a la vez, tiene un calendario muy amplio y eso puede permitir que si en un momento dado estoy en forma poder tener mis oportunidades», ha señalado a Giuseppe Acquadro Comunicazione.
Barceló ha contado sus primeros días en la que será su nueva familia: «La idea era tener un primer contacto con el equipo, hacer una prueba de esfuerzo que es necesaria en los equipos franceses para sacar la licencia y probar tallas de ropa. Ha sido breve pero intenso porque volé el martes y regresé el jueves.
Sin embargo, para Barceló no será su primera vez en el Cofidis ya que estuvo en 2017. Por aquel entonces, el ciclista pudo conocer «algún corredor, director y miembros del cuerpo técnico». Ha apreciado el buen recibimiento que ha tenido en el que se ha sentido «querido». «Estuve hablando con Vasseur -el director general-. Él mostró mucho interés. Eso siempre es un halago«, indicaba. Para el oscense, «el idioma no va a ser un problema» aunque tiene claro que para estar en el Cofidis ve importante aprender «el máximo de francés posible».
El corredor oscense reconoce que aunque haya sido una buena temporada, se le ha quedado «alguna espinita de haber dejado pasar la oportunidad en alguna carrera». Su final de temporada ha sido lo más destacado: «Este año he acabado muy fuerte y muy satisfecho en las últimas carreras, tanto en la Vuelta como en las clásicas francesas. Quizá si hubiera habido más carreras habría seguido corriendo. Ahora hay que desconectar. El 11 de diciembre nos vamos a juntar con el equipo en Calpe y eso llega pronto», explicaba.
Barceló no quiso acabar la entrevista sin dedicar unas palabras al Euskadi-Murias: «Es una gran pena. Un equipo que ha sido capaz de sacar estos resultados con tan poco y de crear una pequeña gran familia es realmente complicado. Y eso el Euskadi-Murias lo había conseguido. Es muy difícil. Si te fijas, en los equipos WorldTour, por mucho nivel que tengan, no se ve esa unión. Aquí lo habíamos conseguido y realmente me da mucha pena», concluía.