La SD Huesca ha cerrado la primera vuelta de la liga ocupando la undécima posición gracias a sus 27 puntos. Además, mantiene un balance de goles metidos/encajados positivos, dado que ha logrado marcar 22 y ha recibido 20. De la misma manera, cierra la primera mitad con una racha ‘positiva’ de resultados, ya que ha encauzado seis jornadas seguidas sin perder. Sin embargo, ¿distan mucho estos datos respecto a los últimos años en Segunda?
En la temporada 2019/2020, año de su segundo ascenso a la élite, la situación fue bastante más positiva. Un total de 35 puntos encumbraron a los oscenses al tercer puesto al final de la primera vuelta. Pese a ello, los números goleadores y defensivos no eran tan diferentes. Los de Míchel consiguieron 25 tantos y encajaron 18. Por lo tanto, lograron rentabilizar más las acciones para sacar un mayor número de puntos.
Por otro lado, dos años antes, en la temporada 2017/2018, cuando lograron ascender, la situación fue todavía mejor. El Huesca hizo una excelente primera vuelta en la que obtuvo 40 puntos gracias a sus 11 victorias, 7 empates y tres derrotas. Además, en esta ocasión, los goles ascendieron a 32 y los recibidos se redujeron a 15. De esta manera, se evidencia el buen papel que tuvo Rubi a la hora de gestionar y confeccionar la plantilla en aquel periodo.
Finalmente, nos remontamos hasta la temporada 2016/2017, es decir, a su primer play off de ascenso a la Primera División. En esta ocasión, la situación es la que más se asemeja a la actual. En la jornada 21, la SD Huesca concluyó la primera vuelta con 28 puntos, tan solo uno más que en la actualidad. Respecto a números, firmó 28 tantos y recibió 24. Además, consiguió siete victorias, siete empates y siete derrotas. Por lo tanto, basándonos en la historia, los azulgranas aún están a tiempo de introducirse en los playoffs.
Como conclusión, una vez visto estos datos, podemos considerar que la situación más semejante es la del año del playoff de ascenso con Anquela. Los números no distan de los actuales. Por lo tanto, todo hace pensar que, si los oscenses realizan una buena segunda vuelta, podrían llegar a ocupar una plaza en la fase de ascenso a final de temporada. Sin embargo, para poder optar a ello, es necesario reforzar diferentes posiciones con el fin de ser competitivos y aspirar a sus objetivos.